LOS CICLOS DE RENOVACIÓN

Nos acercamos al final de año 2018, muy unido en nuestra cultura occidental a las fiestas de Navidad. Las empresas, las familias, los pueblos viven la “experiencia” de enterrar el pasado para revivir el futuro como una manera de tomar fuerzas nuevas en el camino. Steve Job en su célebre discurso de clausura del año académico el año 2005 en la Universidad de Stanford dijo “la Muerte es posiblemente el mejor invento de la Vida, es el agente de cambio que retira lo viejo para hacer sitio a lo nuevo,” todo es continuación de lo hecho con lo que estamos por hacer.

En el entorno político económico hay situaciones que tendrán que generar cambios en el año 2019. En Estados Unidos la Cámara de Representantes obtiene la mayoría Demócrata: turbulencia política. En México el gobierno de AMLO busca dar un giro a la economía que en el esperado discurso del sábado 15 de diciembre no terminó de aclararse: nuevas reglas para seguir creciendo. En Colombia un tribunal inhabilitó a un consorcio liderado por la constructora brasileña Odebrecht para suscribir contratos con el Estado durante 10 años y lo multó con más de 250 millones de dólares por los actos de corrupción en que incurrió para ganar licitaciones de infraestructura: la corrupción está ante la atenta mirada de la ciudadanía. La inversión extranjera directa que ingresa a Chile entre enero y octubre registró un alza de 25% respecto a igual período de 2017, tras alcanzar un total de US$ 7.834 millones: parece ser el modelo, pero en los negocios se adapta, no se copia. En Perú el Referéndum lanzado por el Gobierno el 9 de diciembre, consolida nuevas formas democráticas de poder que debilitan los partidos políticos: tendrán que ser trasparentes o algunos desaparecerán, la lista puede ser muy larga, el 2018 nos deja incógnitas que habrá que convertir en retos.

La pregunta es a la vez una respuesta: hay que seguir adelante para construir el futuro, adaptarse al entorno político y recordar que los mercados no se han ido, se adaptan, como empresarios tenemos dos vías o sabemos leer los hechos y sacar el mayor provecho o pensar que el mundo tiene que adaptarse a lo que creemos y quedarnos estancados. Estoy seguro que la empresa será un motor de progreso y aliento y eso es lo que el año 2019 nos ofrece, sepamos interpretar los signos.

Que estas fiestas de fin de año sean de esperanza y confianza, enterremos la corrupción miremos el futuro con entusiasmo y actuemos en consecuencia.

La Cámara del Pacífico desea a sus miembros una Navidad de paz y reflexión y excelentes logros en el año 2019, y los acompaña con el empeño y el entusiasmo de siempre.